«¿La chica perfecta de Disney? Ni por asomo». 🎬💔 Saltó a la fama a los 12 años, ganó un Oscar y encantó al mundo… pero entre bastidores hubo batallas contra la bulimia, una fortuna agotada y un diagnóstico que lo cambió todo. Su silenciosa transformación te dejará pensando – historia completa en el artículo de abajo 👇.
No todo el mundo sabe que su carrera empezó cuando sólo era una adolescente de 12 años. Actuó en «Tiger Bay», de 1959, junto a su padre. Su infancia fue definitivamente diferente a la de sus compañeros. El hecho de que tanto su padre como su hermana estuvieran inmersos en el cine y la escritura tuvo su impacto en la formación de la futura estrella. Entre sus primeros trabajos figuran «Whistle Down the Wind» y «The Parent Trap». Cabe mencionar que su aparición en «Pollyanna» le valió merecidamente un Oscar Juvenil.
Rápidamente se convirtió en uno de los jóvenes talentos de su generación. Sin embargo, el éxito precoz y el exceso de atención también trajeron sus retos. Mills lo intentó todo para mantener su imagen de jovencita a la que los espectadores querían ver. En secreto, luchó contra la bulimia, un grave trastorno alimentario en el que una persona tiene episodios regulares de ingesta de una cantidad muy grande de comida perdiendo a veces el control. La persona recurre a muchas formas de evitar engordar, como el vómito.
El deseo de complacer a los demás hizo mella en la estrella durante sus años de formación. A los 20 años renovó su contrato con Disney. Sin embargo, ocurrió otra desgracia. Descubrió que un impuesto del 90% casi había agotado el fondo fiduciario que contenía las ganancias que había cobrado durante sus primeros años. El instante financiero no le permitió rechazar nuevos papeles. Otro incidente que alteró su vida fue su diagnóstico. La estrella acababa de cumplir 62 años cuando descubrió que padecía cáncer de mama.
Esto se convirtió en el mayor reto de su vida. Hayley no tuvo más remedio que empezar la quimioterapia. Sin embargo, los efectos secundarios hicieron que se negara a continuar el tratamiento. Exploró otras alternativas, empezó a apreciar a sus seres queridos y pronto se declaró en remisión. Hoy, a sus 79 años, sigue tan activa como antes. La estrella mantiene su pasión por la actuación.
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