«Encontró una casa en ruinas y la devolvió a la vida» 🏚️➡️🏡 Lo que antes estaba abandonado y roto es ahora una acogedora casa de ensueño, gracias a la visión y el corazón de una mujer. Mira las impresionantes fotos del antes y el después de esta transformación de 76 m² en el siguiente artículo 👇
No hace mucho, esta pequeña casa olvidada se caía a pedazos. El tejado se había derrumbado, las ventanas no eran más que agujeros abiertos por los que entraba el viento y las tablas del suelo estaban llenas de agujeros. Era una imagen desgarradora.
Una pareja de ancianos había vivido allí, pero con los años perdieron la fuerza y la energía para mantenerla. Poco a poco, el tiempo y el abandono se apoderaron de la casa que amaban.
Pero todo cambió gracias a una joven llamada Anna Ehrman, una diseñadora de talento enamorada de la conservación del pasado. Descubrió la vieja casa y decidió que merecía una segunda oportunidad.
En el exterior, el patio se había convertido en una maraña de plantas y arbustos silvestres. Lo que antes era un jardín encantador ahora parecía más bien una jungla. La pequeña casa, de apenas 76 metros cuadrados, se construyó en los años setenta y contaba con unos cuantos cobertizos en ruinas y un viejo huerto de manzanos.
Dentro, las cosas no estaban mucho mejor. Las paredes estaban cubiertas de moho, los muebles estaban rotos o habían desaparecido y el suelo crujía a cada paso. Pero Anna vio potencial, no problemas.
En lugar de derribarlo todo, se centró en restaurar lo que podía salvarse. Buscó artesanos que aún trabajaran con métodos tradicionales de carpintería y los trajo para que la ayudaran. La casa se pintó de amarillo intenso, dándole calidez y encanto.
En la planta baja, rediseñó el espacio para incluir una alegre cocina, una acogedora sala de estar, un pequeño comedor y un aseado cuarto de baño.
En el piso superior había dos dormitorios diminutos, pero con un diseño inteligente se las arregló para colocar camas adecuadas e incluso escritorios.
Uno de los espacios más bonitos era el cuarto de baño. Aunque pequeño, ahora tiene una bañera clásica de hierro fundido, una cómoda vintage y unas suaves cortinas de flores que le dan un aire tranquilo y antiguo.
Lo que empezó siendo una casa destartalada ha vuelto a ser un hogar cómodo y acogedor.
¿Te atreverías con un proyecto así? Cuéntanos tu opinión en los comentarios.