Otros tirarían estas cajas de fresas, ¡pero lo que nuestro héroe hizo con ellas te dejará sin palabras! 😮🤐 Al principio, la gente no creía que pudiera, ¡pero luego le llamaron genio! 👏😉 ¡Les dio una segunda oportunidad y construyó un mini invernadero donde plantas y verduras pueden prosperar! 🥕🥬 ¡Mira cómo cosas aparentemente inútiles pueden convertirse en objetos realmente buenos en este artículo! 👇
Las cajas de fresas del mercado, que a menudo se pasan por alto, pueden reutilizarse en herramientas sorprendentemente prácticas para jardinería y uso doméstico. Estas cajas pequeñas y resistentes son perfectas para organizar desde verduras como cebollas, ajos y zanahorias hasta pequeñas herramientas. Pero con un poco de creatividad, también pueden transformarse en un invernadero compacto.
Mi último proyecto consiste en utilizar estas cajas para construir un mininvernadero para cultivar plantones de coníferas. Este montaje proporcionará un entorno ideal con calor y humedad constantes para que las plantas prosperen. El proceso es sencillo y sólo requiere unas pocas herramientas y algo de ingenio.
Materiales y preparación
Para construir el invernadero, utilicé cuatro cajas de fresas, aunque el tamaño de la estructura puede ajustarse a tus necesidades. Asegurarse de que el invernadero cierra herméticamente es crucial para mantener el clima deseado. Mi marido me ayudó recortando las patas que sobresalían de las cajas con una cizalla para crear una base estable.
Para las dos cajas superiores, que sirven de tapa, hicimos pequeñas «ventanas». Al principio, intentamos cortar estas aberturas con una amoladora, pero al final terminamos el trabajo con cizallas de metal para obtener bordes más limpios.
Proceso de montaje
La estructura del invernadero se sujeta con bridas de plástico. En primer lugar, uní las dos cajas inferiores con un par de bridas y repetí el mismo proceso con las cajas superiores. A continuación, utilicé más bridas para crear bisagras que permitieran abrir y cerrar la tapa con facilidad.
A continuación, cubrí las cajas con film de plástico alimentario y fijé los bordes con cinta adhesiva transparente. De este modo, el invernadero quedó sellado por todos los lados excepto por la parte inferior, donde irá la tierra.
Plantación y cuidados
Una vez terminada la estructura, el siguiente paso era llenar el invernadero de tierra, regarlo a fondo y plantar los plantones. Cuando sube la temperatura, el invernadero puede ponerse a la sombra para evitar el sobrecalentamiento. Este sistema proporciona un entorno excelente para controlar el crecimiento de las plantas y mantenerlas protegidas.
Experimentar con variaciones
Anteriormente, experimenté con una técnica similar utilizando tarros de cristal como invernaderos en miniatura para cultivar coníferas. Coloqué los tarros sobre las plántulas y las mantuve a la sombra, normalmente bajo arbustos de frambuesas, durante un año. El riego regular era esencial para mantener la tierra húmeda.
Este concepto puede ampliarse para quienes tengan más ambiciones jardineras. Utilizando cajas de plástico más grandes y combinando cuatro o cinco de ellas, se puede crear un invernadero más espacioso, adecuado para cultivar hortalizas como tomates, pimientos y berenjenas. En cuanto haga buen tiempo, basta con quitar la tapa y dejar que las plantas crezcan al aire libre.
Este proyecto muestra cómo un objeto sencillo y a menudo desechado como una caja de fresas puede convertirse en una valiosa herramienta para los jardineros. Con un poco de esfuerzo, puedes crear un invernadero adaptable y rentable para tus plantas.